El cáncer de estómago o cáncer gástrico se origina por el crecimiento descontrolado de células malignas en la mucosa interna del estómago, puede aparecer en cualquier parte del estómago y en casos más graves diseminarse a otros órganos del cuerpo, lo que se conoce como metástasis.
Síntomas del cáncer de estómago
En sus etapas iniciales, el cáncer de estómago puede no presentar síntomas evidentes, sin embargo, a medida que la enfermedad avanza, pueden aparecer los siguientes signos:
- Dificultad para tragar: Este es uno de los síntomas más comunes y puede manifestarse como la sensación de que la comida se atasca en la garganta y/o dolor al tragar el alimento.
- Dolor abdominal: El dolor puede variar en intensidad y ubicación, y puede ser constante o intermitente.
- Sensación de saciedad precoz: Es posible que te sientas lleno después de comer una pequeña porción.
- Pérdida de apetito: La pérdida de apetito sin causa aparente es un síntoma común.
- Náuseas y vómitos: Pueden ser leves o severos. Esta sensación ocurre especialmente tras las ingestas.
- Pérdida de peso inexplicable: La pérdida de peso sin causas aparentes puede ser un síntoma no solamente de este tipo de cáncer sino de muchas patologías y otros tipos de cáncer.
- Heces negras o con sangre: La presencia de sangre en las heces puede indicar sangrado en el estómago o el intestino delgado haciendo que las heces se vean negras.
- Vómitos con sangre: Los vómitos con sangre, también conocidos como hematemesis, pueden ser un signo de cáncer de estómago avanzado. Pero también los esputos sangrientos aparecen en cáncer pulmonar.
Factores de riesgo del cáncer de estómago
Existen diversos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollarlo:
- Sexo: Los hombres tienen un mayor riesgo de desarrollar este tipo de cáncer que las mujeres.
- Antecedentes familiares: Si tienes familiares con antecedentes de cáncer deberías tener un estilo de vida preventivo.
- Dieta: Una dieta rica en carnes rojas, carnes procesadas, sal y alimentos ahumados puede aumentar el riesgo de desarrollarlo.
- Tabaquismo: Fumar aumenta significativamente el riesgo de padecerlo.
- Helicobacter pylori: La infección por la bacteria H. pylori está asociada a un mayor riesgo de cáncer de estómago.
- Enfermedades autoinmunes: Ciertas enfermedades autoinmunes, como la gastritis atrófica autoinmune, pueden aumentar el riesgo.
Prevención
Existen ciertas medidas que pueden reducir el riesgo de desarrollarlo:
- Mantén una dieta saludable: Consume una dieta rica en frutas, verduras y cereales integrales. Limita el consumo de carnes rojas, carnes procesadas, sal y alimentos ahumados.
- Deja de fumar: Fumar es uno de los principales factores de riesgo de cáncer de estómago. Si fumas, dejar de fumar es la mejor manera de reducir tu riesgo.
- Trata la infección por H. pylori: Si te han diagnosticado una infección por H. pylori, tu médico te recetará antibióticos para tratarla.
- Controla tu peso: Mantener un peso saludable puede ayudar a reducir tu riesgo de cáncer de estómago.
- Consulta a tu médico: Si tienes algún factor de riesgo de cáncer de estómago, habla con tu médico sobre las pruebas de detección y las medidas preventivas que puedes tomar.
Diagnóstico
El diagnóstico del cáncer de estómago generalmente se realiza mediante una combinación de pruebas médicas, que pueden incluir:
- Endoscopia: En este procedimiento, se introduce una cámara delgada con una luz a través de la boca y el esófago hasta el estómago para observar el revestimiento interno.
- Biopsia: Durante una endoscopia, se pueden tomar pequeñas muestras de tejido del estómago para analizarlas en busca de células cancerosas.
- Pruebas de imagen: Las pruebas de imagen, como la tomografía computarizada (TAC) o la resonancia magnética (RMN), pueden usarse para determinar la extensión del cáncer y si se ha diseminado a otros órganos.
- Radiografía de bario: se trata de una radiografía especial donde se utiliza un líquido de contraste para poder resaltar zonas del estómago y del tracto digestivo en las imágenes.
Tratamiento
Su tratamiento depende de la etapa y la extensión de la enfermedad, la salud general del paciente y las preferencias personales. Las opciones de tratamiento pueden incluir:
- Cirugía: La cirugía suele ser el tratamiento principal para el cáncer de estómago. El objetivo de la cirugía es extirpar el tumor y los ganglios linfáticos afectados.
- Quimioterapia: para destruir las células cancerígenas, puede administrarse antes o después de la cirugía.
- Radioterapia: se trata del uso de rayos X de alta energía con el objetivo de destruir las células cancerosas y reducir su tamaño.
- Terapias dirigidas: son fármacos que atacan específicamente células tumorales sin dañar las células sanas.
- Inmunoterapia: son fármacos que ayudan al sistema inmunológico a combatir el cáncer.